lunes, 31 de diciembre de 2012

Capítulo 2


H
an derribado uno de nuestros Impulsores – dijo una voz preocupada.
- No es problema. No mientras los androides estén activos – repuso alguien con voz grave y despreocupada.
La habitación en que se encontraban los individuos parecía enteramente hecha de metal. Estaba repleta de pantallas y computadoras, pero no como las de la Tierra, sino que eran de un material suave y gelatinoso, y se conectaban al sistema nervioso del operador, por la que sólo poseían monitores. En medio había una larga mesa de vidrio.
En un rincón había una pecera con una cabeza humana flotando en ella.
- No podemos quedarnos sin hacer nada – protestó la voz preocupada.
- ¡Basta! – El que parecía ser alguien con autoridad metió la mano en su túnica y sacó una especie de cilindro sin bases con motivos y detalles. Entonces surgieron dos puntas largas y afiladas: era una lanza portátil. Se levantó de su ornamentada silla y amenazó a su interlocutor – Escúchame, Gaam-Sit, esto no representa problemas para nosotros. La nave sufrió sólo un accidente, así que no debemos preocuparnos.
- En realidad, lo derribó un caza humano.
- ¿Dijiste… caza humano? ¿Cómo puede ser posible? ¿No es un error? – Parecía aterrorizado por la sola idea de que fuera un artefacto terrestre.
- Sí, señor. Al parecer atacaron una de nuestras bases y se apoderaron de un Arco – le informó Gaam-Sit - . Un grupo de ataque ya se dirige hacia allí.
El Señor pareció recobrar la calma y se sentó. Pero luego lo asaltó un pensamiento… Si el piloto era humano…
- Gaam, si derribó al Impulsor, eso significa que advertirá a la población terrícola. Tendremos que viajar. Al pasado.

Capítulo 1


U
na nave en forma de V surcaba el cielo nocturno, protegida por un poderoso campo electromagnético que la hacía invisible al radar y al ojo humano. Mil androides viajaban en ella, pero aún no estaban activados.
De pronto, una enorme chispa surgió de la nada, a unos doscientos metros de la nave. Ese destello se transformó en una brillante esfera plateada y, como si fuera líquida, empezó a adoptar forma y solidificarse. Era una especie de avión, pero mucho más aerodinámico y equipado con armas de plasma. A simple vista, no parecía que nadie lo estuviera controlando; mas luego, del fondo de la aeronave, apareció una figura.
La nave de los autómatas aceleró al ver el fenómeno, pero el avión de combate le dio alcance y disparó un rayo, que rebotó en el escudo y se dirigió a tierra. Luego, el atacante cambió de armas y arrojó un arpón, sin éxito tampoco.
Entonces decidió utilizar su último recurso. Presionó un botón y una especie de fuego azul brotó del aparato hacia la nave androide. Su escudo no sirvió contra tal ataque, y en pocos segundos se estrelló en un bosque, desencadenando un violento incendio.
El piloto vencedor aterrizó su máquina en una ruta vacía. Era humano. Joven, de pelo castaño y ojos grises. Tenía una pequeña cicatriz en el pómulo izquierdo y llevaba ropa de combate. En sus bolsillos tenía extraños artilugios metálicos, que en la oscuridad desprendían un resplandor azulado.
Descendió de su avión y de uno de sus bolsillos extrajo un instrumento alargado y cilíndrico. Lo dirigió hacia la aeronave y ésta se volvió invisible; sencillamente desapareció.
A trescientos kilómetros de allí, un ser plateado comenzó a cambiar de forma, y enterró el cuerpo de Walter Hicks.

domingo, 30 de diciembre de 2012

Prólogo



E
l señor Walter Hicks había publicado un libro hacía un mes. En él hablaba de los alienígenos, y de cómo podrían pasar desapercibidos en la Tierra. Había causado sensación en la comunidad “creyente”.
Eran las 7 a.m. cuando escuchó tres golpes en la puerta de entrada. Como vivía solo, fue a recibir a quien había tocado. Se sorprendió al ver que era su vecino, Phillip. Casi nadie iba a visitarlo, así que se asombró. Cordialmente, lo hizo pasar al hall.
-Usted habló de cosas de las que no debería haber hablado. - dijo Phillip en cuanto su anfitrión cerró la puerta - Habló de alienígenos. Habló de cómo podrían camuflarse. Eso no está bien.
El señor Hicks no entendía nada. Nunca hablaba con nadie de su barrio, así que creyó que su vecino estaba alcoholizado.
-No, no estoy alcoholizado- advirtió el inesperado invitado-. Y sí, como está pensando ahora, puedo leer su mente. Su libro no nos agradó - ¿Nos? ¿De qué está hablando? ¿Está loco? - . No sabemos cómo descubrió todo eso que relata, si son investigaciones o suposiciones; pero decidimos tomar medidas.
En ese momento el cuerpo de Phillip comenzó a sufrir serias transformaciones. Su piel pareció  brillar y luego se volvió plateada, como si le hubieran echado una capa de hierro líquido encima. Su cabello y su ropa desaparecieron, dejándolo cubierto sólo de esa sustancia. Su brazo comenzó a alargarse, a hacerse filoso y puntiagudo. Lo dirigió hacia su anfitrión y luego, lentamente, recuperó su aspecto normal. Por último, abrió la puerta, atravesó el umbral y se fue de la casa.
El señor Walter Hicks yacía muerto en el suelo. Lo había apuñalado un alienígeno.

Conceptos para entender la trama

Crónica de una invasión es un relato basado en un ataque alienígena.

Atención: si desean intentar entender la historia por ustedes mismos, dejen de leer esta introducción-guía.

La historia gira en torno a Ben, un piloto de la Resistencia del 2017 que atravesó una especie de "agujero de gusano" y acabó en el año 2012. Él había sido enviado allí para advertir a la población del peligro inminente, ya que la invasión ocurriría el 29 de noviembre de 2013, y el joven se encontraba en 16 de diciembre de 2012.
Las cosas se complican cuando Benjamin se ve envuelto en un asesinato y sufra un accidente a manos de la última persona que esperaría, un hombre clave para la supervivencia de los seres humanos en el futuro. Ben le explica su rol al personaje, y éste decide ayudarlo.
Acuerdan dirigirse a cierto lugar, pero dos nuevos protagonistas aparecen. Tienen que escapar de las fuerzas extraterrestres (ya que perseguían al personaje principal). Luego se encuentran con el pasado de Ben. Se reencuentran con los alienígenas y escapan nuevamente. Intentan retomar el camino hacia el lugar, pero la nave en la que había llegado Benjamin (y con la que planeaban viajar) es destruida. Se las ingenian para salvarse y vuelven a la ciudad. Allí descubren que el jefe invasor adelantó el ataque a la Tierra, furioso por no poder acabar con ese humano entrometido (Ben).
Los otros personajes y éste deciden ir al corazón de la invasión, ya que podrían robar la nave nodriza y viajar al futuro, donde tendrían más posibilidades de concluir la guerra.

Por ahora, eso es todo. Cada cierta cantidad de capítulos, voy a hacer un informe recopilatorio de todo lo que pasó anteriormente, para no enroscarse en esta trama.